El Hospital Clínico Universitario es pionero en administrar anestesia general inhalada a enfermos operados de corazón. Ese sistema ofrece varias ventajas para los pacientes con una patología coronaria, ya que se reduce el daño que sufre el músculo cardiaco durante el tiempo que está expuesto a los fármacos anestésicos, hay un descenso de las complicaciones y disminuye el número de días de estancia en la unidad de cuidados críticos.

José Cruz y José Luis Guerrero son los anestesiólogos que dirigen la investigación

José Cruz y José Luis Guerrero son los anestesiólogos que dirigen la investigación


De las más de 300 intervenciones de cirugía cardiaca que lleva a cabo el Clínico anualmente, la anestesia, en el 80 por ciento de los casos, se da por vía inhalatoria (los enfermos reciben unos gases por un respirador que les inducen el sueño) en vez de por vía venosa.

Profesionales de la unidad de gestión clínica de anestesiología y reanimación del bloque quirúrgico del Clínico han llevado a cabo un estudio sobre los beneficios de los medicamentos que permiten dormir a pacientes, a través de la anestesia inhalada, operados de corazón. Esa investigación, dirigida por los especialistas en anestesiología y reanimación José Cruz y José Luis Guerrero, ha recibido el premio a la mejor publicación de 2012 en la prestigiosa revista ‘Current Pharmaceutical Design’ (publicación internacional sobre revisiones de fármacos).
Para la realización de esa investigación se analizó y evaluó a un total de sesenta personas intervenidas; se comprobó que hubo una disminución considerable de los efectos adversos de la cirugía cardiaca.
Según explicó a este periódico el doctor Cruz, ese estudio permitirá profundizar en los mecanismos que provocan el efecto beneficioso en pacientes intervenidos del corazón. Este especialista en anestesiología y reanimación explicó a SUR que la anestesia inhalada que se administra a los enfermos coronarios durante y después de la operación hace que el corazón sufra menos.
En ese sentido, destacó que los nuevos dispositivos que se emplean en el Clínico en intervenciones de enfermos con dolencias coronarias permiten aplicar la anestesia inhalada en el postoperatorio inmediato (de cuatro a seis horas). «Es un proceso que llevamos a cabo de forma sistemática, porque está demostrado que es mejor para los pacientes que la sedación por vía venosa», dijo Cruz.
La investigación sobre la anestesia inhalada en enfermos intervenidos de corazón en el Clínico ha sido distinguida también por la Sociedad Andaluza de Anestesiología, que ha concedido una beca para que ese estudio se amplíe a lo largo de los dos próximos años.
Fuente: Diario Sur