Un grupo de cirujanos cardiovasculares del Hospital Clínico de Málaga han participado en un estudio sobre insuficiencia tricuspídea, una patología que afecta a una de las válvulas del corazón (la tricúspide), dolencia que afecta a menos del 1% de la población, cursa a menudo asintomática y de la que existen escasos datos sobre los resultados de su tratamiento quirúrgico.
Los médicos han analizado a un total de 119 pacientes consecutivos con insuficiencia tricuspídea grave sometidos a cirugía entre abril de 1996 y febrero de 2010. Para el tratamiento quirúrgico de la insuficiencia tricuspídea grave, en general, los especialistas contemplan dos opciones: la reparación de la válvula o su sustitución por otra, resultando preferible, siempre que sea posible, la primera opción sobre la segunda.
«Por desgracia no siempre puede repararse la válvula tricúspide», explica Carlos Porras, cirujano cardiovascular del Clínico, que señala que en ese caso es preferible reemplazar la válvula por una prótesis biológica.
Fuente: La Opinión de Málaga