Si bien la asociación entre fibrilación auricular (FA) y el riesgo de sufrir de ictus es conocida, la FA también podría estar asociada a un aumento del riesgo de otras enfermedades muy graves como los infartos de miocardio, insuficiencia cardiaca, enfermedad renal crónica y episodios de muerte súbita. Así se desprende de una investigación publicada en la revista British Medical Journal y dirigida por la Universidad de Oxford (Reino Unido).
La investigación publicada tenía el objetivo de analizar la relación entre la FA y otros episodios cardiovasculares dado que las evidencias existentes hasta el momento no eran concluyentes. El estudio se basó en un metaanálisis (investigación basada en datos provenientes de estudios anteriores) a partir de los resultados de 104 estudios anteriores, con una muestra total de 9.686.513 participantes de los que 587.867 padecían de FA. En comparación con aquellos que no estaban diagnosticados de FA, ésta arritmia se asoció con un aumento de 1,46 veces más de riesgo de mortalidad por cualquier causa. En relación con el aumento de la probabilidad de padecer otras enfermedades, ésta fue de 1,96 en eventos cardiovasculares mayores; 2,33 en el caso de ictus; 2,33 en ictus isquémico; 1,61 en cardiopatía isquémica; 1,88 en muerte súbita; 4,99 en insuficiencia cardiaca; 1,64 en enfermedad renal crónica; y, finalmente, 1,31 en enfermedad arterial periférica. En cambio no se encontró asociación significativa de mayor probabilidad de accidente cerebrovascular hemorrágico.
A partir estos resultados y a pesar de la conocida relación entre FA e ictus, esta arritmia estaría más asociada a otras enfermedades y problemas cardiovasculares (especialmente en insuficiencia cardiaca) por lo que, según el experto, estos resultados tendrían implicaciones en la priorización tanto de los recursos sanitarios públicos como de innovaciones en el desarrollo de intervenciones en pacientes adultos con FA.
Hay que tener en cuenta que la FA es la arritmia cardiaca más frecuente en la práctica clínica, afectando hasta el 4,3% de los españoles mayores de 40 años (3,9% en el caso de las mujeres y 4,7% en hombres) según datos de 2013 del Estudio de Observación de Fibrilación y Enfermedad Coronaria en España (OFRECE), por lo que se requiere “la puesta en marcha de intervenciones dirigidas a reducir estos riesgos en los adultos afectados por este tipo de arritmia”, como apuntó Ayodele Odutayo.
Fuente: Feasan
Odutayo A, Wong CX, Hsiao AJ, et al. Atrial fibrillation and risks of cardiovascular disease, renal disease, and death: systematic review and meta-analysis. BMJ 2016; 354:i4482. doi: http://dx.doi.org/10.1136/bmj.i4482