Mantenerse físicamente activo y tener una actitud positiva alargan la vida de los pacientes con enfermedades cardiacas, según un reciente estudio. Ser optimista y hacer ejercicio son dos aspectos positivos que se influyen mutuamente entre sí puesto que hacer ejercicio está relacionado con mayores niveles de optimismo y con una mejor salud. Así pues, los pacientes con enfermedades cardiacas que hacen ejercicio y son positivos serían más longevos respecto a los pesimistas.
Por otro lado, hacer ejercicio y ser optimista supone un riesgo menor de hospitalización por motivos relacionados con el corazón. Sin embargo, la tasa de mortalidad no presenta diferencias entre pacientes positivos y pesimistas si ambos perfiles hacen ejercicio. Hay que apuntar que no se dispone de información relativa ni al tipo de ejercicio ni a la cantidad. Es por todo ello que, según los investigadores del estudio, se recomienda que en la rehabilitación cardiaca se promueva aumentar una actitud positiva y se fomente realizar ejercicio físico con regularidad.
Estas conclusiones se obtuvieron a partir de un estudio con 600 pacientes de enfermedad de la arteria coronaria de un hospital de Dinamarca. Los investigadores utilizaron un cuestionario para evaluar el estado de ánimo y, cinco años más tarde, hicieron un seguimiento. Los resultados del estudio se han publicado en la revista Circulation.
Fuente: http://www.nlm.nih.gov/ a partir de American Heart Association, news release, Sept. 10, 2013
Fuente: Feasan